25 nov 2009

¿EJÉRCITO Ú ONG?

Hay una especie de autobús que recorre las tierras de España, en realidad es una unidad móvil de las Fuerzas Armadas. Hace poco estuvo por nuestras tierras. De vez en cuando, estas unidades móviles se pueden ver por los pueblos captando aspirantes a Soldado. Iba yo en mi coche el otro día y escuché en una emisora comarcal a una señora que decía ser sargento (o sargenta, según la Aído) del Ejército español. Esta señora hablaba de lo bonito y del buen rollito que había actualmente en las Fuerzas Armadas, que unirse al Ejército era muy ventajoso. También daba una dirección de Internet para quién quisiera más información. Yo no quería más información, pero por curiosidad entré a alcahuetear y oigan, que me quedé alucinado con la paginita de los soldados. Se nota que la Ministra de Defensa ha influido y les ha quedado una Web muy chuli, donde se ofrece a los jóvenes un trabajo de futuro (es lo que tienen las guerras, que cuando acaba una empieza otra, tienen trabajo hasta la jubilación), también ofrecen un sueldecito fijo y formación continua, un trabajo donde poder ayudar a los demás. Vamos, un chollo.

Yo no sé muy bien si es que la crisis nos está afectando al cerebro, además de al bolsillo, porque es que si no, no se explica. Coincido con Pérez Reverte cuando dice que “alguien debería explicarle a la ministra de Defensa lo que es un soldado”. Que busque en el diccionario y podrá comprenderlo un poco mejor.
Ahora, Defensa, con todos los desempleados que hay, está captando más soldados que nunca, bajo el vil engaño de conseguir un empleo seguro en el Ejército de las misiones humanitarias. Por qué no hablan claro, por qué no dicen que ese trabajo conlleva ir, posiblemente, a una guerra, y no a una misión humanitaria, que para lo de humanitarios ya están las ONG´s. Y es que en este país, a los políticos del Gobierno les da la diarrea cada vez que tienen que decir la palabra guerra. Por eso la camuflan con otras más bonitas y así de paso, le comen el tarro a los jóvenes que se alistan creyendo que van a coger setas al bosque, luego más de uno volverá en una caja de madera mientras los mismos políticos que les prometieron que iban a tener un empleo de futuro, les entregan medallitas a sus familiares dolientes. Que sí, que tenemos que mantener un ejército profesional, puede, y que éste tiene que ir a la guerra, pues peor para los que se alisten, pero por favor, llamemos a las cosas por su nombre.

Miguel Ángel Rincón Peña