29 may 2014

MANU LOBO

A veces, me gusta escribir en esta columna de opinión sobre personas que me voy encontrando en el camino. Ya he contado alguna vez mis encuentros con personas anónimas que me han relatado historias y vivencias. En otras ocasiones también he reseñado a personajes más públicos como cantantes, músicos, poetas, etc. 
Y es que, por mi afición a la música y a la poesía, tengo la suerte de poder conocer a muchas personas interesantes que aportan constantemente cosas positivas. A una de esas personas la conocí hará cosa de un año, aunque ya lo había visto actuar un par de veces. Su nombre es Manuel Jiménez Lobo, aunque artísticamente es Manu Lobo, cantautor de Bornos con residencia en la localidad de Algar. 
Antes de lanzarse a la canción de autor, pasó por varios grupos y tocó diferentes estilos musicales, tales como blues, country, surf-rock, etc. En su actual etapa, Manu ha dejado la guitarra eléctrica para darle protagonismo a la acústica. Así, con su “Cort Acoustic”, una pandereta y una armónica se pasea por los escenarios derrochando energía, letras sinceras sin trampa ni cartón y buen rollo. 
“Yo que me pase la vida / como un trapecista de un circo ambulante. / Clavando espuelas heridas / sobre las costillas de mi Rocinante.” De esta manera comienza una de las canciones de Manu, una balada dylaniana, con protagonista bohemio, idealista y un poco canalla. Para que se hagan una pequeña idea, cuando uno lo escucha, ya sea en directo o en sus discos, le vienen a la mente nombres tan importantes como Tom Waits, Bob Dylan, Nacho Vegas, Joaquín Sabina… 
En estos días, Manu Lobo está preparando un nuevo trabajo discográfico titulado precisamente “El bohemio soñador”. Doce nuevas canciones llenas de sensibilidad y buen gusto. Como curiosidad, diré que el disco llevará una portada dibujada por el autor en colaboración con su hijo Manuel, de tan sólo cinco años. 

Desde que conocí a Manu, hemos compartido risas, escenarios y carretera. ¡Y lo que nos queda! 
Para más información, Twitter: @manuloboblues 

Miguel Ángel Rincón Peña

15 may 2014

LOS DOS CAMINOS

“Hay dos caminos”: votar al PP o votar al PSOE. Esta frase tan manida a la que nos tiene acostumbrado el bipartidismo patrio, la pronunciaba hace unos días el secretario local del Partido Socialista Obrero Español en Arcos, Isidoro Gambín, en un mitin de su partido de cara a las Europeas. Parece ser que hay políticos que en tiempo de elecciones se les nubla la vista y no ven más allá del blanco y el negro, olvidando toda una amplia gama de colores que entre el uno y el otro existen. Una vez que pasen las elecciones, empezarán a ver mejor algunos colores con los que pactar, si fuera preciso. 
Si Isidoro hubiese dicho esa frase en otra época, quizá la ciudadanía le creería, pero tal y como está el panorama actual… ¡Hombre, por favor! 
Pero esperen, no se vayan, que aún queda lo mejor. Nuestro protagonista, aseguró que el PSOE “se atribuye ser el partido de izquierdas por antonomasia”. Sí, creo que Isidoro Gambín junto a Manuel Chaves, Felipe González, José Bono, y otros grandes “camaradas” del “socialismo” de este país, fueron hace años a registrar la patente de la “izquierda” a nombre del PSOE. 
Bromas a parte, parece que el bipartidismo le está empezando a ver las orejas al lobo, y ese lobo es multicolor. Quizá por eso, en un último esfuerzo por mantener las distancias con el PP, Isidoro abogue por esos dos caminos: o le votamos al PP que es muy malo, o votamos mejor a su PSOE, que son más buenos. Pero esa teoría se desmonta sola, o mejor dicho, la desmontan ellos mismos, sólo hay que escuchar a Felipe González o a Cañete para saber cuáles son sus verdaderas intenciones, llegado el caso. También se desmonta comprobando que el PSOE y el PP votan de la mano en España, por ejemplo, modificaron juntos la Constitución para, en definitiva, pagar a la Banca antes que a los servicios públicos. Lo mismo es que Gambín y sus “camaradas”, entienden por partido de izquierdas el que privatiza (Repsol, Endesa, Telefónica, etc.), el que promueve leyes de desahucio express, el que entrega a la Banca 200.000 millones de euros, el que defiende a la Monarquía con capa y espada, y un largo etcétera que nos tendría aquí hasta la semana que viene.
La prepotencia que demuestra el bipartidismo al hacer declaraciones como las anteriormente citadas, no pasa inadvertida para el pueblo, ese que está pagando con creces las pésimas políticas de esos dos partidos que ahora vuelven a pedir el voto con una amnesia preocupante y un rostro como el cemento. 
Pero oigan, que esto es solamente mi humilde opinión, allá cada cual. 

Miguel Ángel Rincón Peña 

8 may 2014

MI PRIMERA (Y ÚNICA) CORRIDA

Parte de mi niñez la pasé en Ronda, en plaza Teniente Arce, esquina Virgen de la Paz. La casa estaba frente a la plaza de toros. Las tardes de corrida, se colaba por las ventanas el sonido de los pitos, los aplausos o los gritos consternados cuando se producía alguna cogida. 
Una vez, mi madre, que tenía un conocido que era aficionado a la “fiesta nacional”, decidió pedirle el favor, ante mi insistencia, de que me llevara a ver una corrida en la plaza, pues a mis 8 años sentía mucha curiosidad, puesto que casi todos mis amiguitos del colegio ya habían ido (viviendo en Ronda es normal). Y así fue, una tarde vino a recogerme aquel señor con su traje y su puro, me agarró de la mano y pasamos por taquilla. Yo estaba nervioso, primero porque no quería ir con aquel señor, y segundo por la emoción de ver una corrida de toros en primera persona. 
Recuerdo que la plaza estaba hasta la bandera. Me quedé impresionado porque todo me parecía grande, aquel círculo de tierra batida, flanqueado por piedras y tablas con la bandera de España, y todo aquel gentío. De repente sonó la música y empezaron a desfilar los toreros, luego me enteré que aquello se llamaba “el paseíllo”. Minutos después, abrieron la puerta de chiqueros y salió un enorme toro negro que parecía que se iba a salir del ruedo. El torero lo recibió con el capote. Mis ojos observaban atentamente aquella extraña danza entre el toro y el torero, pero pronto aquella danza se convirtió en algo mucho más violento y macabro, puyazos en el morrillo, banderillas…, y para terminar, la espada atravesando el cuerpo del animal. Y sangre, mucha sangre. 
Sentí una profunda pena por aquel animal que yacía en la arena y un aborrecimiento absoluto por toda la gente que disfrutaba con el sufrimiento y muerte de aquel hermoso toro. Y lo peor es que era el primero de seis. Cuando salió el segundo, la certeza de que acabaría como el primero me agobió tanto que me puse a llorar, quizá con la esperanza de que aquel hombre se apiadase de mí y me sacara de aquella olla a presión. 
Una vez en mi casa, le dije a mi madre que no quería volver más a la plaza de toros, mientras hablábamos, se podía escuchar el murmullo del público. Recuerdo que mi madre estaba viendo la tele, me sentó con ella y me dio un vaso de La Casera (para que se me pasara el disgusto). 
A ella le gustaban mucho los animales, en mi casa siempre hubo algún gato o perro. Creo que aquella tarde me dejó que fuera a la plaza para que viera por mí mismo lo que no se debe hacer con un animal. Y aprendí bien la lección, casi treinta años después aún recuerdo aquella angustia. 

Miguel Ángel Rincón Peña 

26 abr 2014

TIEMPOS DUROS

La vida es algo así como un continuo Déjà vu. Primavera, verano, otoño, invierno. Navidad, Semana Santa, Feria, etc. En la infancia no nos damos cuenta, pero conforme vamos creciendo y alcanzamos una cierta edad, con bastante frecuencia solemos decir aquello de: “Hay que ver cómo pasa el tiempo”. Esta misma tarde, dando un paseíto por las afueras del pueblo, me encontré con un par de personas que iban en la misma dirección que yo, y una de ellas dijo esa frase, a lo que su acompañante respondió: “Es verdad, parece que era ayer cuando nos estábamos comiendo las uvas y dentro de unos días estamos ya en mayo”. Son cosas que hacen pensar. 
El paso del tiempo, el transcurrir de la vida, ocupan un lugar privilegiado dentro de la poesía, por ello -y por otros muchos motivos-, me gusta escuchar a las personas de edad avanzada, esas que tienen mucho camino andado. Hay que cuidar a nuestros mayores, porque son enciclopedias andantes, tratados de supervivencia y sabiduría muchas veces ignorados. 
 Siempre que me es posible presto toda mi atención en escuchar las historias que cuentan estas personas. Se les nota que están deseosas de relatar sus experiencias a quienes quieran escucharlas y aprender. La mayoría suelen hablar de su infancia y juventud, rememorando todos los sacrificios que tuvieron que realizar para salir adelante. Todos suelen referir lo malo que fue aquel “año del hambre”, que no fue un año, sino algunos más. En aquellos tiempos muchos tuvieron que comer hasta “las cáscaras de las naranjas”. Un abuelito me contó un día algo que nunca se me olvidará. En los años cuarenta, años de postguerra, una mañana, este hombre -entonces niño- estaba sentado en el escalón de su casa junto a su hermano. Vieron pasar por la acera de enfrente al hijo de un cacique portando en su mano una rebanada de pan con manteca. Los dos niños se quedaron fijamente mirando aquella rebanada, pues no habían desayunado, porque según él, “éramos más pobres que las ratas” y raro era cuando comían dos veces al día. Justamente cuando el niño de la rebanada de pan volvió la esquina, su hermano fue a levantarse para entrar en la casa y se desmayó. ¡Qué tiempos tan duros e inhumanos! Nuestros mayores son ejemplo de lucha, de resistencia, de supervivencia, y tenemos tanto que aprender de ellos… y tan poco tiempo… 

Miguel Ángel Rincón Peña  


15 abr 2014

LA DELGADA LÍNEA

Esta semana me gustaría reflexionar sobre algunos aspectos de la religión en general y la Semana Santa en particular, desde una posición lo más objetiva posible, lo cual es bastante complicado, porque uno ve y lee cosas que claman al cielo, nunca mejor dicho. 
En esta semana, Susana Díaz, la presidenta de la Junta de Andalucía, o la presidenta de todos los andaluces, como le gusta autocalificarse cada vez que le ponen un micro delante, participaba en una visita (tradición política andaluza) a algunos de los titulares de las cofradías más representativas de la Semana Santa de Málaga, como el Cristo de la Buena Muerte y el Cautivo. También he leído que José Luis Núñez, alcalde de Arcos de la frontera, realizará las primeras “levantás” en tres cofradías. Ejemplos hay miles, como esa “moda” de las procesiones en las escuelas, o algo tan fuera de lugar como nombrar alcaldes-perpetuos a santos y vírgenes, o mantener los crucifijos en los salones de pleno de algunos ayuntamientos. 
Yo soy muy respetuoso con las creencias personales que cada uno pueda tener, pero en el momento que se mezcla Religión y Estado, la cosa cambia. Vivimos -en teoría- en un Estado aconfesional, en el cual, la religión tendría que estar, principalmente, en las iglesias, sinagogas, mezquitas, etc. Pero eso no es así, pues la religión católica, concretamente, se inmiscuye constantemente en la vida pública de este país. 
Veo muy bien que una persona quiera participar en un acto religioso, en su derecho está, pero que lo haga como un ciudadano más, no como representante de un pueblo, porque entonces, los sectores de ese pueblo que no comulguen con esas ideas religiosas, no se sentirán representados por ese alcalde o por esa presidenta de la Junta de Andalucía. La coherencia, en estos casos, se hace más que necesaria. Y no critico a ningún partido especialmente, porque en mayor o menor medida, en casi todos ellos hay casos parecidos en los que se confunde dónde termina la religión y comienza la vida civil. 
No se si me he explicado bien, pues he utilizado un lenguaje y unas formas lo más “light” posible para que nadie se sienta ofendido y para evitar cualquier tipo de polémicas. Mi intención no es otra que dar un toque de atención a nuestros gobernantes y también a ciertos sectores, en este caso de la Iglesia, para que no traspasen esa delgada línea que separa una cosa de otra. 

Miguel Ángel Rincón Peña

11 abr 2014

POESÍA SUICIDA

Hace unos días, conversaba con unos amigos amantes también de la poesía, sobre un tema del que no se habla demasiado, porque seguramente no sea algo del agrado de nadie, se trata de las tendencias suicidas de algunos poetas. Siempre he sentido mucha curiosidad por comprender mejor los poemas y poder así empatizar mucho más con sus autores. Eso me ha llevado a indagar en sus vidas leyendo sus biografías. 
Pues como decía, en dicha conversación, a altas horas de la madrugada, surgieron varios nombres de personas que decidieron quitarse la vida, muchos de ellos forman parte de mis poetas de cabecera. Escritores con una sensibilidad y talento exquisitos que pasaron a formar parte de la historia y la leyenda. Pondré unos ejemplos, como curiosidad, de algunos de estos insignes (aunque desesperados) poetas y sus últimos versos. 
“Muero de libertad / mientras el mundo es un incendio”. Estos fueron los premonitorios versos que el gran poeta soviético Vladimir Maiakovski dejó escritos. El 14 de abril de 1930 se disparaba un tiro en Moscú. Célebre es la fotografía de su cuerpo inerte recostado en la cama de su habitación moscovita. 
La estadounidense Anne Sexton escribió: “…y un poco de este anhídrido carbónico / que bien dosificado te hace dormir tranquila para no despertar de nuevo / al tedio de los días”. Poco después, encendió el motor del coche en su garaje y falleció por inhalación de anhídrido carbónico, el 4 de octubre de 1974. 
En España, el poeta José Agustín Goytisolo se suicidó el 19 de marzo de 1999 arrojándose al vacío desde el balcón de su casa, aunque otros (entre los que se encuentran sus familiares) prefieren pensar que su caída fue a causa de un accidente. “Una tristísima ceniza / que caía y caía sobre la tierra, / y sigue cayendo en mi memoria, / en mi pecho, / en las hojas del papel en que escribo”
Quizá uno de los suicidios más famosos y cantados del mundo de la cultura sea el de la poetisa argentina Alfonsina Storni, que se internó en las aguas del Atlántico en Mar del Plata, el 25 de octubre de 1938. Seguro que recuerdan aquella canción cuyo estribillo decía: “Te vas Alfonsina / con tu soledad / ¿qué poemas nuevos / fuiste a buscar?” 

Miguel Ángel Rincón Peña

8 abr 2014

SOBRE GUSTOS…

Muchas veces me preguntan cual es mi libro favorito, mi autor preferido o mi película favorita, dar una respuesta a esas cuestiones es, ciertamente, imposible. Son demasiados libros favoritos, demasiados autores preferidos y demasiadas películas favoritas. Quizás sí pueda decir las que más me marcaron, sobre todo, en mi infancia, que es la etapa más importante y donde se cimenta nuestro futuro como persona. Recuerdo un libro que seguramente todos conocerán, el cual, este año cumple cien primaveras, titulado Platero y yo, de Juan Ramón Jiménez. Aquel burrito pequeño, peludo y suave, lo conocí gracias a mi maestro de primaria Antonio Ramos del Pozo. Cada tarde, nos leía un capítulo del libro. Con el tiempo, lo volví a leer, y su lectura me pareció genial. También recuerdo las Rimas y Leyendas de Bécquer, o el Romancero Gitano de Lorca. En las navidades del año 1999, vi en un escaparate de Prado del Rey un pequeño libro llamado Primeros versos, del poeta Francisco Pozo Poley. Lo compré y me lo leí en un par de días. Cuando concluí la lectura de aquel librito de pastas verdes me dije: ¡Yo quiero hacer esto! Al poco tiempo pude conocer al autor, que sería mi primer prologuista, además de convertirse en un gran amigo. 
En cuanto a los autores preferidos, también hay muchos, demasiados para citarlos aquí, sólo diré que he leído muchísimo a Miguel Hernández, Gil de Biedma, Ángel González, Bukowski, Roger Wolfe o al arcense Pedro Sevilla. De todos ellos y de otros muchos he aprendido siempre una barbaridad. Recuerdo que cuando yo empezaba en la difícil tarea de construir versos, Félix Grande me dijo que para ser poeta hay que leer mucha poesía y hacer de esponja con ella. Después, ese mismo consejo lo escuché más veces de boca de otros autores. 
Referente a las películas que más me han gustado, tengo que decir que la mayoría son clásicos. El discreto encanto de la burguesía, dirigida por Luis Buñuel, no sé cuántas veces la habré visto, y cada vez me gusta más. El hombre elefante, del gran David Lynch. El halcón maltés, de Dashiell Hammett. La trilogía del apartamento (Repulsión, La semilla del diablo y El quimérico inquilino) de Roman Polanski y tantas otras. Pero bueno, ya está bien de hablar de mis gustos, la semana que viene... hablaremos del Gobierno. 

Miguel Ángel Rincón Peña 

27 mar 2014

POBREZAS

Ayer por la mañana, mientras desayunaba, un periódico de tirada nacional estaba en la barra, casi rozándome el codo. La tentación por leerlo era grande, ni siquiera quería mirar su portada, por si acaso. Al final decidí echarle un vistazo, aunque fueran solamente las páginas de cultura o de sociedad, pero inevitablemente me topé con una de esas noticias que se queda dando vueltas en la cabeza durante todo el día. El titular era demoledor: “Los niños españoles, los más pobres de Europa, sólo por detrás de Rumanía”. El último informe de Cáritas Europa pone de manifiesto que "las políticas de austeridad han fallado a la hora de solucionar problemas". La tasa de riesgo de pobreza en menores alcanza ya casi el 30%, nueve puntos por encima de la media europea. 
Me encontraba en la barra del bar, desayunando, con el periódico en la mano, mientras en una esquina, la tele estaba puesta en el canal de noticias, y dos políticos, uno del PP y otro del PSOE, junto a varios tertulianos, debatían acaloradamente por algún asunto de actualidad política. Si el del PP decía blanco el del PSOE lo contradecía rápidamente y decía negro. Si el del PSOE decía No, su contrincante no vacilaba ni un segundo en decir Sí. En fin, todo un espectáculo lamentable y aburrido que le hace a uno pensar que así no salimos de esta. De vuelta al periódico, seguí leyendo la noticia: Por personas en riesgo de pobreza o exclusión social se entienden las que disponen de sólo un 60 % del ingreso medio del resto de la población; las que tienen entre el 40 % y el 50 % son catalogadas como "pobres" y las que cuentan con menos del 40% se encuentran en situación de "pobreza extrema". 
La gente más vulnerable es la que está pagando las consecuencias de esta maldita crisis y de la pésima gestión del Gobierno (anterior y actual) que no duda en rescatar Bancos (y ahora parece que también se rescatarán las constructoras de las autopistas de peaje) antes que a las familias necesitadas. 
Apuré la taza de té y le pagué al camarero. Mientras caminaba, iba pensando en lo injusta que a veces es la vida. En España, mientras Rajoy dice que ve la luz al final del túnel, tres de cada diez niños españoles viven en riesgo de pobreza y exclusión social. Sin duda, hay una mayoría amplia de políticos que viven en otra realidad completamente distinta a la que padece el Pueblo. Luego se quejarán de la desafección de la ciudadanía por la política. Pues oigan, se lo han ganado a pulso. 

Miguel Ángel Rincón Peña

20 mar 2014

MALASYSIA AIRLINES

El pasado 8 de marzo (Día Internacional de la Mujer), un avión de la compañía Malaysia Airlines, iba camino de Pekín con 239 personas a bordo cuando, misteriosamente, desapareció sin dejar ningún rastro. Muchas han sido desde entonces las especulaciones y teorías de todo tipo que se han dicho sobre esa desaparición. Ayer mismo, un satélite australiano localizaba a 2.300 kilómetros de la ciudad de Perth dos posibles restos del avión malasio. Uno de ellos, de 25 metros de largo, podría ser un ala. Pero las autoridades no aseguran nada aún. Por lo tanto, continúa el enigma. 
Mientras tanto, la gente lleva días dando su opinión desde las diferentes redes sociales. Quizá las más estrafalarias se hayan producido en Twitter. 
Ya se sabe que cualquier acontecimiento de interés que suceda en la realidad, la legión de “twiteros” la convierten rápidamente en tendencia (hashtag) y ahí es donde empieza la bola de nieve a crecer. 
Estos días, repasando tweets sobre este tema en concreto, me encontré teorías totalmente estrambóticas. Hay quiénes, no sin cierta acidez, especulan que la desaparición del Boeing 777 fue a causa de una abducción alienígena, otros apuntan a un secuestro perpetrado por los servicios secretos de Kim Jong Un (en caso de duda, la culpa siempre es de los norcoreanos), también está la teoría de una conspiración por parte de alguna multinacional en busca de publicidad a lo grande o un suicidio colectivo planeado. 
Todos estos ejemplos, nos tendrían que hacer reflexionar sobre la deshumanización que cierta parte de la sociedad sufre cuando se sienta frente a un ordenador y se abre una cuenta en alguna red social. Cómo se puede frivolizar e incluso hacer bromas sobre un tema tan serio como, por ejemplo, la desaparición de un avión repleto de personas. 
 No es la primera vez que pasa, y seguramente no será la última. Ocurre continuamente, y en algunos casos roza el insulto y el mal gusto. 
Yo soy de la opinión de que las redes sociales, llámense Facebook, Twitter, Myspace, etc., tienen que servir para comunicarnos, para estar informados, e incluso para divertirse. Pero bueno, esa es solamente mi opinión, la realidad está en los “hashtag”… 

Miguel Ángel Rincón Peña 

14 mar 2014

"POR AMOR AL ARTE"

Jorge Garasa es el portavoz de Hacienda del Partido Popular en las Cortes de Aragón, y hace un par de semanas, sugirió que se trabaje sin cobrar. Sí, han leído bien. El señor Garasa dijo en la Cámara de las Cortes que no es lo deseable, pero que en EEUU se ha hecho. 
Elogió así, la conciencia ciudadana de miles de ciudadanos de Estados Unidos que fueron a trabajar sin cobrar durante el tiempo que la Administración tuvo problemas de tesorería. También destacó que el 25% de los trabajadores alemanes tengan “minijobs” de cuatro o cinco euros la hora y un salario máximo de 450 euros mensuales. Cosa que ya estamos sufriendo en España. 
El tal Jorge Garasa (ex-empresario), hizo una exaltación de la precariedad laboral y de la esclavitud moderna y se quedó tan contento. Este señor, por llamarlo de alguna manera, resulta que cobra un sueldo bruto anual de 53.055 euros, entre los que se incluyen casi 10.000 euros en dietas por trasladarse del centro de Zaragoza a las Cortes de Aragón. Y todo ello por una media de diez días de “trabajo” al mes, teniendo en cuenta que en el mes de enero y en verano apenas acude a la Cámara por no haber periodo de sesiones. Qué fácil es decir, desde la seguridad que le da su sillón (y sus buenos sueldos) que las personas trabajadoras se empleen gratis o se dejen explotar gustosamente en unas condiciones indignas. Y yo me pregunto, ¿por qué no trabaja el señor Jorge Garasa gratis en las Cortes de Aragón? ¿Qué pensarán todas esas personas que le votaron en las elecciones y que ahora tienen que escucharle decir todas estas barbaridades? 
El portavoz de Hacienda del PP en Aragón es, sin duda, una persona violenta, pues practica la violencia desde su escaño contra un sector determinado de la sociedad, en este caso, sobre la clase trabajadora. Cuánto escarnio más tenemos que soportar, cuánta violencia más saldrá de sus bocas, cuántas leyes injustas e indignas recaerán sobre las espaldas del Pueblo. Y si las personas desempleadas, precarias, explotadas, salen a la calle a defender sus derechos y su dignidad, no faltarán porras ni pelotas de goma para reprimir a la ciudadanía, no faltará represión que intente acallar las voces disidentes en nombre de lo que ellos llaman “democracia”. ¡Valiente democracia!

Miguel Ángel Rincón Peña